Médicos de Georgia implantaron a un hombre de más de 50 años que había perdido su pene tras un cáncer, un dedo en sustitución del miembro. El director de la clínica, Ivan Kusanov, aseguró que la "innovadora y única operación de este tipo en el mundo" fue un éxito.
Durante la operación, que duró 17 horas, los médicos de la clínica de cirugía estética también le pusieron un conducto urinario artificial. Apenas doce días después de la operación, que fue llevada a cabo a principios de diciembre del año pasado, el paciente ya podía orinar con normalidad.
Desde entonces también se pudo comprobar que el "dedo-pene" también "funciona de manera completamente normal como órgano sexual", afirmó Kusanov.
Los huesos de los dedos fueron mantenidos en el miembro. "Tras su utilización, puede volver a doblarlo" afirmó Kusanov. El médico no quiso brindar más detalles al respecto y subrayó que "primero tenemos que patentarlo todo y después revelaremos la técnica".