Un chico de 18 años se hace un tatuaje de lo más curioso en su brazo: se ha tatuado un ticket del McDonalds.
El joven noruego se ha tatuado una factura del McDonalds en el brazo. Un amigo suyo explica que se trata de un castigo por ser demasiado activo con las chicas. Sus amigos le dieron a escoger entre tatuarse una Barbie en el trasero o una factura de su cena en el McDonalds en el brazo.
“Quizás cuando tenga 50 o 60 años ya no me haga gracia, pero ahora me hace mucha”, dice el chico. En la factura se puede ver el menú que han escogido sus amigos donde hay una cheeseburger y “nonstop McFlurry”.